Durante el último curso se implementó en la Fundació de l’Esperança un proyecto piloto de apoyo y acompañamiento socioeducativo a familias con niños de 0 a 3 años en situación de vulnerabilidad. Este proyecto, enmarcado dentro del paradigma de la parentalidad positiva, tiene por objetivo fortalecer las competencias parentales, fomentar las habilidades sociales y empoderar a las familias.
El proyecto ha sido impulsado por Fundación 'la Caixa' en el marco del programa CaixaProinfancia, con la financiación de los fondos europeos Next Generation dentro del Plan de Recuperación y Resiliencia del Ministerio de Inclusión y Migraciones. En el proyecto han participado un total de 48 familias con las que se ha apoyado la crianza y educación de los hijos e hijas, mediante la implementación de talleres familiares para tratar temas primordiales como la alimentación, el juego, el vínculo afectivo, el lenguaje, hábitos y autonomía, límites y acompañamiento emocional, entre otros. También, se ha brindado apoyo económico en bienes de higiene y alimentación para ayudar a cubrir necesidades infantiles básicas y se han desarrollado itinerarios para la inserción sociolaboral.
El perfil de familias que acompañamos son mayoritariamente mujeres migradas con poca red familiar y social en el territorio. En este sentido, la red de apoyo toma especial relevancia, puesto que la maternidad en los primeros años de vida supone una etapa muy vulnerable para las familias, dado que se experimentan cambios muy intensos que implican que muchas mujeres se sientan solas, con sentimientos de confusión, miedo e inseguridad. Si, además, tenemos en cuenta los factores de riesgo asociados a un nivel socioeconómico bajo, la vulnerabilidad de las familias es considerablemente mayor. Así, el hecho que hayan podido tener un espacio donde socializar, compartir vivencias, desazones e inquietudes alrededor de la maternidad y la crianza ha tenido un impacto muy positivo en las familias y su salud mental y emocional. Han podido romper con el aislamiento familiar y social en el cual se encuentran muchas de ellas y esto ha contribuido a la mejora de su autoestima.
Per una altra banda, el dia a dia i el ritme frenètic amb què es viu, fa que sovint no es trobin espais per a la relació amb els fills i filles. En aquest sentit, l’espai familiar ha significat un espai de relació privilegiada entre mare i fill o filla, on a través del joc, les cures i les activitats proposades han pogut enfortir el seu vincle i millorar la qualitat de la relació. També, les famílies han trobat un espai d’aprenentatge a partir de les diferents temàtiques treballades als tallers, així com del modelatge que s’ha fet entre les famílies i les professionals, donant valor a la diversitat cultural i la seva riquesa. Aquest aprenentatge i intercanvi d’experiències ha tingut un impacte en la seva autoestima i confiança en si mateixes, valorant les seves capacitats innates i adquirint diferents estratègies i recursos per acompanyar la criança i educació dels seus fills i filles.
Otro aspecto a destacar es que el espacio familiar ha beneficiado el desarrollo integral de bebés y niños a través de la posibilidad de habitar un espacio físico preparado con materiales adecuados para su etapa evolutiva. Así, han podido desplegar sus capacidades motrices, cognitivas, sociales y comunicativas a través del juego y el movimiento libre; compensando así la carencia de estimulación y exploración con las que se pueden encontrar por las particularidades de sus hogares (pensiones, habitaciones realquiladas, pisos con poco espacio para poder moverse, etc.).
Dado el impacto positivo que ha tenido el proyecto en el vínculo materno-infantil, el desarrollo de los niños y el sentimiento de pertenencia de las familias y la buena acogida que ha tenido por parte de ellas, este próximo curso 2023-2024 se dará continuidad al proyecto aumentando grupos y familias atendidas, ofreciendo también un grupo de acompañamiento y apoyo a mujeres gestantes. En este sentido, apostamos por el acompañamiento y apoyo en la crianza de los primeros años de vida como factor de protección, prevención y promoción del buen trato y de la resiliencia de las familias.
“Como madre me siento más confiada, he podido expresarme y sentirme yo”.
M., madre participante del Espacio Familiar 0-3
“Estas dos horas son solo para mí y para él y no pienso en otra cosa”.
Thamina, madre participante del Espacio Familiar 0-3